Glifosfato


Ya no distingue entre la realidad y los sueños, es parte del proceso metamórfico que ocurre en sus ojos. Telarañas y aserrín se acumulan en sus párpados para confundirla, para agregarle peso a su cabeza y darle un aire eternamente soñoliento, de cansancio extremo. 

Son grotescos sus sueños. Grotescos y caricaturescos. Son piratas que vomitan y son corazones espichados y son pulpos que comen zorros en salsa de tomate y son y son. Pero son rentables sus sueños, los vende por  Internet y por su facultad, hace fortunas con ellos para después comprarse muchos dulces, mentas y gomas sobre todo. Si son importados, mejor.

Hace arte acompañada de su gato, que es el dueño de la compañía. Toulouse es quien gestiona y administra la compra de materiales y los envíos de mercancía desde su rincón, solo parando para perseguir una mosca de vez en cuando y por no mas de diez minutos al día. Responsable y eficiente Toulouse.




Comentarios